hacia ninguna parte

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Llega demasiado deprisa, ya el momento está aquí, comenzó el principio de la pérdida, la carrera del olvido. Será una huída sin soles, sin ocasos. Ya no habrá más primaveras, no mas resurgires, todo será un rápido descenso hacia la oscuridad más absoluta, ya no hay regreso ¿qué hacer?...tengo miedo
Abandonada por fín a la frialdad del invierno que me atrapó ¿hacia dónde emigrará ahora mi corazón en medio de tanta desolación? tiemblo, tiemblo como antes, como siempre, solo que ahora tengo mucho frío y tengo miedo, miedo de esta caída vertical que se avecina.
Solo sombras irán llenando mi alma, sombras cuyos contornos se irán desdibujando a medida que se vayan escurriendo y dilatándose en el tiempo. Ya todo será nada, solo olvido.

en silencio

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En el silencio nos vivimos, en él nos buscamos, en él nos encontramos

"... hay en tí un silencio estático, duradero, inefable, aquietado e incluso místico" no sé en verdad de quién son estas palabras si mías o acaso de tanto sentirlas las haya hecho mías, no sé. Lo cierto es que no hay mayor presencia, mayor sonido que el silencio de lo no dicho y lo callado, el silencio de lo ansiado y lo secreto. Es un rumor de amantes que conforman tu existencia toda, al tiempo, estás irremediablemente repleto de complicidades y palabras, de deseos e historias, de imágenes y seres que huyen y se ocultan ante el temor de ser solo una tímida e inocente fantasía surgida en su vacío, en el tuyo...

Goces del silencio que no son sino ecos de desgarros de incomprensibles actos que retumban dentro mío y se hacen mudas mis palabras, mundo hecho silencio donde reverberan, en forma de risa, los sonidos del pensamiento.

Descansa en el silencio el alma y sin embargo, aún sin decir nada, en este silencio tuyo un escándalo estalla y, te descubro. Nombres, rostros, actos de entonces que el tiempo retrotrae y me muestra aquello que antes nunca ví.

Pero, dime tú, mi secreto callado, ¿qué cabe en un silencio, en tu silencio? acaso una sonrisa, una duda, una mirada...nada?? ¿qué imágenes son esas que te devuelve el silencio desde tu ventana? ¡ Dime, granuja, de cuántas almas se alimenta tu mirada!!

Silencio que en mí se hunde cual daga que penetra hasta los más recónditos rincones del alma

días viejos

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Llega un tiempo en que la melancolía nos ronda y nos hace vagar por entre historias inconclusas. Abatidos los recuerdos se desnudan de poesía y se inclinan hacia la tierra al tiempo que, gimendo y silenciando, se hacen olvidos alargando la agonía. Días viejos se van desvaneciendo lentamente en la cortedad de unos días nuevos que raudos pasan. Viento seco y recuerdos secos también, ruedan entrelazados confundiéndose en su deambular, siendo ahora, ante tanto tiempo aciago, que el alma despierta y queda quieta, muda, velando sueñosde días que ya son viejos. Gritos apagados, tenues susurros de vida aún se escapan por entre las sombras del día, mas la noche galopa cuando ya no hay madrugada...

El miedo nos lleva a deshacer el tiempo y llenarnos de vacíos.